USO LANZA SU CAMPAÑA PARA EL 25-N
noviembre 21, 2016USOCV EXIGE UN PACTO DE ESTADO CONTRA LA VIOLENCIA MACHISTA
noviembre 29, 2016La Unión Sindical Obrera (USO) se desmarca de la convocatoria unilateral de movilizaciones para el mes de diciembre anunciadas por los sindicatos CCOO y UGT, mientras no asuman la democratización del marco sindical como pieza clave para la consecución de los objetivos que el conjunto de la sociedad necesita y se permita oír la voz de una gran parte de la sociedad a la que representamos otras organizaciones, y anuncia reuniones con los distintos grupos parlamentarios junto a actos reivindicativos propios.
Tras la conformación del nuevo gobierno, USO reitera las prioridades políticas que necesita la sociedad y advierte del peligro de prolongarlas aún más en el tiempo. La recuperación económica tiene que traer de forma inmediata calidad al empleo, reducción significativa de las tasas de pobreza y la sostenibilidad y calidad del sistema público de protección social.
Es el momento de un nuevo modelo de Diálogo Social y un nuevo marco de negociación colectiva verdaderamente representativo, al servicio de los trabajadores y trabajadoras, dejando de blindar por ley el monopolio sindical actual que ha demostrado ser insuficiente y que debilita al resto del movimiento sindical.
El último comunicado conjunto entre patronales y CCOO y UGT es una repetición de los pasados, que han ido sujetos a temas más de conveniencia institucional que a las cuestiones urgentes que necesita la sociedad, y que no han pasado de ser más que una mera declaración de intenciones.
Por todo ello, USO manifiesta:
- La firme convicción de poner fin a las políticas de austeridad y la apuesta por un plan estratégico de estímulo económico y del empleo, retrasando las exigencias de la UE de reducción del gasto mientras no haya una verdadera mejora en conjunto de la ciudadanía y buscando políticas alternativas a medio plazo para el cumplimiento de los compromisos de consolidación.
- USO solicita al nuevo gobierno priorizar: la reducción de la tasa de desempleo con medidas concretas e inmediatas; el crecimiento de los salarios; la recuperación de las condiciones laborales y de trabajo estable, pleno y con derechos, con una reforma sustancial de la última Reforma Laboral y la retirada de bonificaciones que no generen empleo neto; el incremento del salario mínimo interprofesional; el impulso de los sectores industriales; la inversión en infraestructuras e investigación y desarrollo; los planes de choque para el desempleo de larga duración; la revisión de la Garantía Juvenil, la lucha contra el fraude laboral, junto a un nuevo planteamiento del Sistema de Formación para el Empleo al servicio de los trabajadores y no de las organizaciones que quieren seguir controlando esos fondos.
- La USO exige la defensa del sistema público de protección social, con pactos de estado que garanticen una educación de calidad pública y sostenida con fondos públicos, junto a la sanidad, dependencia, la calidad y garantía de nuestras pensiones, protección por desempleo y los servicios públicos esenciales.
- Manifestamos la urgente necesidad de una distribución equitativa de la riqueza y una lucha decidida contra la pobreza que una parte muy importante de nuestra sociedad está padeciendo, mediante una reforma a fondo en materia fiscal que contemple un justo reparto de las cargas tributarias, la lucha contra el fraude y la corrupción, la planificación y los paraísos fiscales, y que todos aporten según lo que realmente perciben de forma definitiva.
- Que se aborde, por salubridad constitucional, la regeneración democrática del marco político y sindical, con sendas reformas de la Ley Orgánica de Libertad Sindical y la normativa electoral sindical actual y fijación de mínimos análogos de representatividad institucional a los que existen en el ámbito político, que garanticen realmente la pluralidad actual de la sociedad, que sea más democrático y participativo, sin sectarismos e irracionales exclusiones, ni prebendas injustas hacia determinadas organizaciones que cuentan con suficiente implantación y que representan a muchos miles de trabajadores.
- Es imprescindible un cambio profundo en el modelo de Diálogo Social en nuestro país, alejándose de la institucionalización patronal y sindical actual y de los acuerdos marcos inútiles a los que hemos asistido en los últimos años, mediante un nuevo marco de interlocución entre gobierno y centrales sindicales, y de relaciones laborales, junto a una normativa que legitime el papel de las distintas organizaciones sindicales.